También se plantea llegar a acuerdos con las contrapartes de Estados Unidos, en materia de corresponsalía bancaria.
La banca comercial y el Banco de México (Banxico) han puesto sobre la mesa algunas opciones para el manejo de dólares en efectivo que entren al país, sin afectar la autonomía del banco central, ello, ante la iniciativa de reforma que lo obligaría a comprar el excedente de divisas.
En la primera sesión del Parlamento Abierto sobre el tema, el gobernador del Banco de México, Alejandro Díaz de León reconoció que es clara la necesidad de mejorar la cobertura de servicios financieros en los puntos de llegada de remesas, además de que deben robustecerse y ampliar las relaciones de corresponsalía con las entidades del exterior.
Lo mismo reconoció el presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM), Luis Niño de Rivera.
“La esencia del problema está en que un número no menor de ellos (migrantes que visitan México, turistas extranjeros o empleados del sector turismo) no tiene posibilidad de cambiar sus dólares legítimamente ganados en el mercado formal, a tipos de cambio competitivos, y acuden a centros cambiarios, restaurantes, comercios y gasolineras, que les pagan en promedio 10% por debajo del tipo de cambio más competitivo en el mercado, que es el que ofrecemos los banco comerciales”, dijo el representante de loa banqueros.
Al respecto, Alberto Gómez Alcalá, director corporativo de desarrollo institucional, estudios económicos y comunicación de Citibanamex, resaltó que la banca puede ofrecer productos para atender a la población objetivo de la iniciativa, y que trae dólares en efectivo al país.
Como ejemplo, mencionó que los límites en los que se venden y compran dólares en efectivo, podrían revisarse con las autoridades, sobre todo en zonas fronterizas y turísticas. Refirió que, pensando en los migrantes, hoy hay disponibles cuentas de fácil apertura que requieren sólo de información simplificada y sin necesidad de trámites presenciales.
En tanto Carlos Rojo, presidente ejecutivo de la ABM destacó que el “de-risking”, que es por lo que bancos del exterior rompieron relación de corresponsalías con algunos bancos mexicanos, limita el avance de la inclusión financiera.
Esta situación, dijo, puede revertirse mediante la construcción de un diálogo binacional que refuerce los lazos de corresponsalía entre ambos países.
Luis Niño de Rivera agregó que un punto para incluir a los migrantes a productos y servicios financieros, sería la implementación en México de la identidad digital, pues aunque hay bases de datos biométricos, éstas están dispersas.
Fuente: EL ECONOMISTA
Fuente: Edgar Juárez