El Servicio de Administración Tributaria (SAT) informó que las acciones de eficiencia recaudatoria tuvieron su mejor primer trimestre dado que cobraron 46,328 millones de pesos (mdp) a los contribuyentes en dicho periodo. Esto representó un incremento anual de 63.8%, de acuerdo con el Informe Tributario y de Gestión. En el mismo periodo del año pasado las acciones de eficiencia recaudatoria aportaron 26,360 millones de pesos al fisco.
Las acciones de eficiencia recaudatoria se dividen en tres estrategias: el programa de cumplimiento de obligaciones, el programa de vigilancia profunda y de cobranza coactiva. En el primer trimestre del 2022, cada una de ellas recaudó 21,435, 18,667 y 6,227 millones de pesos, respectivamente.
La cobranza coactiva tuvo una contracción en su recaudación de 25% en comparación anual, mientras que el programa de cumplimiento de obligaciones y el programa de vigilancia profunda los incrementos anuales fueron de 57 y 195 por ciento.
El programa de vigilancia del cumplimiento de obligaciones tiene como objetivo que los contribuyentes cumplan con sus declaraciones y pagos de manera oportuna.
El programa de vigilancia profunda se enfoca en identificar contribuyentes que presentan variaciones atípicas en el pago de sus declaraciones, así como detectar inconsistencias. La cobranza coactiva promueve el pago de adeudos determinados.
En tanto, los esfuerzos adicionales de recaudación consiguieron 139,934 millones de pesos, la mejor cifra para un primer trimestre; asimismo, representó un aumento anual de 17.7%, de acuerdo con el SAT en su informe.
De los 139,934 millones de pesos, los grandes contribuyentes aportaron 42,801 millones de pesos, cifra 7.3% superior a lo reportado en el primer trimestre del 2021.
“Si bien el cumplimiento voluntario es preferido a las acciones de fiscalización, los esfuerzos adicionales no se han relajado, por lo que en enero-marzo de 2022 se fiscalizó a 270 Grandes Contribuyentes”, publicó el SAT. La cifra está por debajo de las 360 grandes empresas fiscalizadas en el mismo periodo del 2021.
Los actos de fiscalización, que forman parte de esfuerzos adicionales, recaudaron 50,805 millones de pesos, esto es un incremento de 0.2% con los primeros tres meses del 2021. De los más de 50,800 millones de pesos, 18,922 millones de pesos corresponden a actos de fiscalización de comercio exterior.
El SAT detalló que en la fiscalización al comercio exterior se identificaron conductas evasivas en tiempo real de los sectores automotriz, acerero, textil y confección; electrónicos, vinos y licores, entre otros, por ser considerados de mayor riesgo.
Las estrategias de recaudación, que también forman parte de los esfuerzos adicionales del SAT, aportaron 46,328 millones de pesos, esto representó un aumento anual de 63.8 por ciento.
En este año se observa que las acciones de fiscalización fortalecen una cultura para un mejor cumplimiento voluntario y autocorrección, ya que los ingresos tributarios crecieron en términos reales”, sostuvo el SAT.
Sumado a lo anterior, el 81% de los contribuyentes encuestados consideraron que el SAT es eficiente para combatir la evasión fiscal, lo que representa una mejora en un punto porcentual respecto al año anterior.
Sube la rentabilidad y baja el costo de recaudación
Paralelamente, el Servicio de Administración Tributaria informó que durante el primer trimestre del 2022, por cada peso invertido en actos de fiscalización recuperó 124.8 pesos. Esto es aumento de tres centavos frente a lo registrado en el mismo periodo del 2021, 124.5 pesos cuando se recuperaron 123.4 pesos por cada peso invertido.
“El crecimiento menos pronunciado entre 2021 y 2022 se debe a que las acciones de fiscalización han logrado modificar la cultura de pago en los contribuyentes, quienes han optado por cumplir de manera voluntaria, en tiempo y forma sus obligaciones”, reconoció el SAT.
En tanto, el costo de la recaudación descendió a 25 centavos por cada 100 pesos recaudados, en los tres primeros meses del año. Este es el nivel más bajo en los últimos cinco años. En el primer trimestre del 2021, el costo fue de 0.28 centavos por cada peso invertido.
Este resultado se alcanzó mediante el uso de nuevas tecnologías que simplificaron los procesos para la atención de los contribuyentes”, sostuvo el SAT.