La inflación mundial está impactando a los emisores de remesas y a los receptores. Así se observa en un análisis desarrollado por WorldRemit, una remesadora digital establecida en Londres.

La firma encuesto a 1,000 emisores de remesas internacionales en Estados Unidos, Reino Unido y Australia y 78% de éstos reconoció que han sentido el impacto directo del aumento del costo de vida que ha significado la inflación.

Como consecuencia, todos los emisores han realizado una reingeniería de sus gastos diarios desde que inició este año, para mantener su capacidad de enviar dinero a sus hogares.

Así, 49% de los entrevistados refirió que comen menos fuera de casa; mientras que 46% han limitado reuniones sociales para ahorrar dinero y 25% ha optado por el uso de transporte público en lugar de conducir sus propios autos.

Como se recordará, la inflación de los energéticos mantiene una tendencia alcista desde el año pasado y en específico, en los tres países originadores de remesas donde levantaron la encuesta, la escalada de precios de energéticos se ha presentado de la siguiente forma.

En Estados Unidos, de donde se envía cerca de 90% de las remesa que recibe México, la inflación de energéticos registró una variación anual de 34.6% en mayo, según datos recabados por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE); en Reino Unido la inflación de energéticos completó una fluctuación anual de 52.6% en el mismo mes; y en Australia, este comparativo a 12 meses es de 20 por ciento.

Compromiso de inmigrantes

De acuerdo con el directo de WorldRemit para las Américas, Jorge Godínez Reyes, “la resiliencia y el compromiso de los inmigrantes con sus seres queridos en sus países de origen ha demostrado ser vital en el periodo donde los gastos domésticos están aumentando en todo el mundo”.

Este estudio demuestra que incluso en tiempos de inestabilidad financiera, muchos inmigrantes están haciendo ajustes conscientes en su vida diaria para mantener el flujo regular de remesas a sus familias y seres queridos en sus países de origen, resaltó.

Según los resultados de la encuesta, 52% de los emisores de remesas reconocieron que ahora envían dinero a menos personas. De hecho, 72% del total envía dinero a familiares cercanos a partir de este año.


Fuente: EL ECONOMISTA