La tecnológica financiera Kontempo, recibió una inversión de 30 millones de dólares, monto que destinarán al fortalecimiento de su operación en México, además de la consolidación de su modelo de negocio, un “Compre ahora pague después” (BNPL, por sus siglas en inglés), dedicado al comercio entre empresas.

La ronda de inversión contó con la participación de diversos fondos de capital de riesgo como Portage, Scor Ventures, Upper 90, Tectonic Ventures, Asymmetric Capital Partners e Ígnea, el fondeo se suma a uno realizado en enero pasado, por 1 millón 200,000 dólares, a la par de la fundación de la plataforma.

Actualmente la red de negocios con la que opera la plataforma asciende a 26 empresas. Además de aumentar su lista de afiliados con el financiamiento, la fintech busca mejorar la tecnología en sus operaciones en los comercios afiliados, mediante la integración de interfaces de programación de aplicaciones en los comercios digitales de sus colaboradores, por lo que destinará parte de su inversión al desarrollo de estas herramientas.

La plataforma tiene proyectado captar clientes cuyo ticket promedio se encuentre entre 20,000 y 500,000 pesos, en la modalidad de crédito facilitada por la tecnológica financiera.

Crece adopción, se detiene inversión

La adopción de métodos de pago electrónicos como el BNPL aumenta en diversos canales, especialmente en segmentos de los más jóvenes, debido a que la generación millennial lidera la adopción de soluciones “Compre ahora pague después”, por encima de la generación Z que cuenta con 54% de uso en esa población, de acuerdo con un estudio de Pymnts.com.

El estudio detalló que 45% de los millennials usaría servicios de BNPL si fueran proporcionados por una institución de la banca tradicional.

Pese al creciente interés por adoptar este método de pago, la inversión en plataformas que proporcionan soluciones de pago similares han recibido menor financiamiento que en anteriores ocasiones, como la empresa de origen sueco Klarna, que el mes pasado anunció una inversión por 800 millones de dólares, aunque con una pérdida de 85% en su valuación anunciada en junio del 2021, que ascendió a 45,600 millones de dólares.


Fuente: EL ECONOMISTA
Autor: Sebastian Estrada