El uso de métodos de pagos digitales en establecimientos urbanos asciende a 44%, en comparación con 78% del uso de efectivo, mientras que en comercios de zonas rurales la adopción se ubicó en 28%, mientras que el uso de efectivo ascendió a 87%, de acuerdo con información oficial.

Las bajas tasas de adopción para los pagos digitales, en comparación con el uso de dinero físico reflejan un interés de las fintech por digitalizar los pagos en la región; durante la mesa de análisis “Digitalización de las Pymes”, organizada por Ualá, los participantes coincidieron en que las pequeñas y microempresas representan un mercado atractivo por su tamaño, compuesto por 4 millones de Pymes, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

“La digitalización del efectivo es algo que inevitablemente va a suceder, vemos que los medios digitales, tienen ventajas contra el dinero físico, como atención de calidad en línea, la seguridad  y aumento de transaccionalidad. En las Pymes se refleja en una facultad de aceptación de mayores métodos de pago”, comentó Maia Eliscovich, directora de Ualá Bis.

Por otra parte, Daniela Uribe, gerente nacional de Melonn México, comentó que tras la pandemia las Pymes tuvieron que hacer un esfuerzo por implementar herramientas digitales, aunque indicó que no todas logran adaptarse de manera adecuada.

“Hay un desconocimiento de temas tecnológicos, digitales, logísticos, bancarización, pasarelas de pago; las pymes se enfrentaron a muchos frentes que definitivamente se tienen que unir como si fuera un rompecabezas, para que funcione una Pyme digital”, agregó Uribe.

En adición, Raúl Bustamante, gerente de marketing y comunicación de eBay América Latina, destacó que la capacitación es fundamental para que los negocios logren una implementación exitosa, además de que el acompañamiento en la digitalización es un determinante clave.

“Es muy importante que estas empresas reciban apoyo desde el inicio para establecer todos los fundamentos en su negocio y aprovechen totalmente una plataforma al momento de subirse a una”, explicó Bustamante.


Fuente: EL ECONOMISTA
Autor: Sebastian Estrada