Pese avance en inclusión, todavía faltan 200 millones de personas por bancarizar en AL

Se prevé un incremento en el valor del mercado de pagos, al haber mayor digitalización.

Si bien la emergencia sanitaria por Covid-19 hizo que más personas tuvieran acceso a servicios financieros formales en América Latina gracias al avance de la digitalización, todavía hay un pendiente de 200 millones de personas para incluir al sistema financiero formal.

Mauricio Fernández, director de Operaciones en las Américas de la  firma BPC Banking Technologies, indicó que si bien a la par del avance en la inclusión financiera en la región se espera que se potencialice el mercado global de pagos, el cual se prevé alcance, hacia el 2025, un valor de 2 billones de dólares, también se prevé una tendencia a la alza en materia de fraudes, los cuales podrían representar pérdidas globales cercanas a las 200,000 millones de dólares para ese año.

“Según la firma Americas Market Intelligence, la población bancarizada en América Latina creció 24% durante la pandemia, pero aún hay 200 millones de personas en la región que no están bancarizadas, entonces hay un potencial de mercado enorme para avanzar en la inclusión financiera”, acotó el directivo de la firma enfocada a  proveer soluciones de pagos digitales.

En este contexto, Fernández apuntó que a la par de este avance que ha habido en inclusión financiera, también se ha observado que esto es aprovechado por los delincuentes para realizar fraudes.

El directivo de BPC Banking Technologies ejemplificó que en México, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros recibió de enero a mayo de este año 8,102 reclamaciones por posibles fraudes cibernéticos, es decir, un alza de 89% respecto al mismo periodo del 2020.

“Hay tanta gente no bancarizada en la región, que hay un potencial enorme para los bancos digitales y para la banca tradicional también... Pero también para el tema del fraude, por ejemplo, muchos gobiernos están entregando subsidios por medio de tarjetas de prepago y los defraudadores buscan la suplantación de identidad de los beneficiarios”, acotó Fernández.

Fuente: EL ECONOMISTA
Autor: Fernando Gutiérrez