Pese a que México, un país donde se estima que se blanquean alrededor de 50,000 millones de dólares al año, ha demostrado avances en su lucha contra el lavado de dinero y financiamiento al terrorismo.
Pese a que México, un país donde se estima que se blanquean alrededor de 50,000 millones de dólares al año, ha demostrado avances en su lucha contra el lavado de dinero y financiamiento al terrorismo, uno de sus retos a superar en esta materia es la falta de coordinación entre dependencias y autoridades encargadas de combatir dichos ilícitos, indicó Wendy Lora Pérez, presidenta del Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica (GAFILAT).
Durante una videoconferencia, Lora Pérez destacó los avances que tuvo México desde el 2008, tiempo de la primera evaluación al país realizada por el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI), hasta la segunda revisión, misma que se dio a conocer en el 2018 y en la cual las autoridades nacionales han trabajado en las respuestas a las observaciones de dicho organismo multilateral.
“Hay una serie de recomendaciones que hace la evaluación del GAFI y el GAFILAT y tiene que ver con trabajar más coordinadamente, coordinar todavía más los trabajos para que no se dupliquen los esfuerzos. México es un país bastante grande, tiene autoridades federales y locales, gobernadores y procuradores de cada estado y eso dificulta el trabajo porque todo eso tiene un andamiaje que debe de articularse”, detalló Lora Pérez en la videoconferencia organizada por la consultora GMC360.
Lora Pérez apuntó que luego de darse a conocer los resultados de la segunda evaluación, México ha presentado tanto al GAFI como al GAFILAT dos informes sobre las observaciones realizadas en dicha revisión, donde destacan temas como la ley de Instituciones de Tecnología Financiera, conocida como ley Fintech, o disposiciones para que los sujetos obligados sean más efectivos en la detección del beneficiario final de una operación.
Pese a las disposiciones emitidas, Lora Pérez resaltó que el tema de la detección efectiva del beneficiario final continúa como un reto pendiente para el país. “(Se debe) fortalecer todavía más el tema del entendimiento del beneficiario final, que es un reto no solamente para México sino para todos los países de la región (América Latina)”.
La presidenta del GAFILAT, organismo de base regional creado a semejanza del GAFI, también destacó que otro reto para México es que la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) provea de información más certera a la Fiscalía General de la República (FGR), con el fin de tener investigaciones efectivas que logren tanto incautación de bienes como sentencias condenatorias.
De acuerdo con la evaluación que tanto el GAFI como el GAFILAT hicieron a México, la única recomendación de estos organismos que el país no cumplió fue la del reporte efectivo de información de las actividades vulnerables a las autoridades correspondientes.
En este contexto, Lora Pérez apuntó que el tema de las actividades vulnerables y su obligación de reportar información de indicios de posible lavado de dinero a las autoridades, continúa como un pendiente, pues falta que las empresas obligadas tengan más conciencia sobre el riesgo de blanqueo de capitales a las que están expuestas y, además, inviertan lo necesario para temas de cumplimiento en la materia.
“Las actividades vulnerables, al igual que en todos los países son los últimos (en obligaciones antilavado), los más nuevos, los que menos recursos tienen. Todo sistema cuesta dinero, es una inversión... como autoridades tenemos que trabajar con ellos para hacerlos entender a cómo montar sus sistemas sin que financieramente colapsen en ello”, expresó la representante del GAFILAT.
Actividades vulnerables que deben reportar información de operaciones que rebasen cierto umbral:
• Activos virtuales.
•Desarrollo inmobiliario.
• Juegos y sorteos.
• Tarjetas de prepago y cupones.
• Blindaje.
• Metales y joyas.
• Blindaje.
• Obras de arte.
• Comercialización de vehículos.
Fuente: El Economista