En México no hay un riesgo alto de actividades terroristas, pero hay factores que pudieran facilitar el financiamiento al terrorismo.
Luego de la publicación por parte de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la guía destinada a organizaciones sin fines de lucro para evitar ser vehículos de financiamiento al terrorismo, estas instituciones tienen que robustecer sus controles por medio de mitigantes que las ayuden a cumplir con las sugerencias de la autoridad; sin embargo, el reto para que esto suceda es mayor pues muchas desconocen los procesos que deben seguir para aplicar los mecanismos adecuados.
En entrevista, Adrián Sánchez, director para América Latina y el Caribe de Crímenes Financieros y Cumplimiento de la firma LexisNexis Risk Solutions, indicó que, si bien México no tiene un riesgo alto de financiamiento al terrorismo, el estándar mundial apunta a que las organizaciones sin fines de lucro robustezcan sus controles antilavado y contra el financiamiento de prácticas terroristas.
“El reto es interesante porque la mayoría de estas organizaciones no están acostumbradas a este tipo de controles, seguramente no cuentan con un oficial de cumplimiento como tal, a veces le cargan este tipo de responsabilidades al área legal, y en ocasiones ni eso. Entonces será un reto interesante, pero al final del día es necesario”, consideró Sánchez.
De acuerdo con el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI), las organizaciones sin fines de lucro pueden ser mal utilizadas por los grupos terroristas para financiar sus actividades en distintas formas: desde la apropiación indebida de los recursos que recaudan hasta la infiltración a su funcionamiento para promover la ideología que impulse actos de terrorismo.
En México, la más reciente versión de la Evaluación Nacional de Riesgos reconoce que si bien en el país no hay un riesgo de terrorismo, sí hay factores que abren la posibilidad de que sea utilizado como plataforma financiera de grupos terroristas, debido a su posición geográfica, porosidad en las fronteras y la existencia de organizaciones sin fines de lucro.
Para el experto de LexisNexis Risk Solutions, el tema del terrorismo ha sido un foco de preocupación en distintos países en el contexto de la pandemia, por el crecimiento de algunos grupos en ciertas regiones, por lo que se abre, aún más, la puerta para que las organizaciones sin fines de lucro sean mal utilizadas para financiar actividades terroristas.
“Se ha exacerbado más este tema con la pandemia y se hace más uso de organizaciones sin fines de lucro para ayudar de diferentes formas (al terrorismo) y se abre más esa puerta a que sean explotadas y sean mal utilizadas precisamente por los pocos controles que ellas tienen”, acotó Sánchez.
Tanto la UIF en su guía, como el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI), han resaltado que una de las herramientas que deben de aplicar las organizaciones sin fines de lucro para evitar ser mal utilizadas es el del enfoque basado en riesgo.
Para Sánchez, este mecanismo es de suma importancia para, en primera instancia se analicen los riesgos a los que estas organizaciones están expuestas en materia de financiamiento al terrorismo y en, segunda, para mitigarlos.
“Tienen que entender cuáles son los requisitos y que es lo que busca promover la UIF, y que lo ha hecho GAFI por mucho tiempo, con el enfoque basado en el riesgo para no cerrarle las puertas a todo mundo”, comentó Sánchez.
El directivo de LexisNexis Risk Solutions indicó que fortalecer sus controles también ayudaría a estas organizaciones a establecer más relaciones con los bancos, los cuales por muchos años les han negado la apertura de cuentas por el riesgo que pueden representar tanto en lavado de dinero como en financiamiento al terrorismo.
Fuente: EL ECONOMISTA
Autor: Fernando Gutiérrez